Mousse de Chocolate



           Si os gusta el chocolate este es vuestro postre.

Se trata de una exquisita receta de Rachel Khoo con mi toque personal. Este es el mousse de los
adictos al chocolate o chocaholiccomo ella suele llamarlos. “El tacto suave y sedoso de la crema pastelera combina a la perfección con el chocolate negro fundido...” El resultado es espectacular. 

A las maravillosas propiedades del chocolate ya les dediqué una entrada, así que no voy a repetirme. En esta ocasión me gustaría llamar vuestra atención sobre otro aspecto relacionado con su origen.

“El cacao se cultiva principalmente en países en vías de desarrollo (regiones tropicales de África Occidental y de América Latina) mientras que son los países desarrollados los mayores consumidores”(UNCTAD, Conferencia de las Naciones sobre Comercio y Desarrollo)

Paradójicamente, África suministra más del 70% del cacao que se comercializa en el mundo mientras que sólo consume un 3% de su producción.
   
El negocio del cacao está en manos de grandes multinacionales que no tienen ningún tipo de escrúpulos en generar desigualdades, consentir abusos y explotación infantil allí donde se instalan. Amparada en gobiernos corruptos que miran para otro lado, la industria del chocolate es cómplice de estas barbaridades y sigue sin aportar soluciones definitivas al problema.

La riqueza que genera la producción de cacao contrasta con el empobrecimiento de la población africana. Ante situaciones como esta muchos africanos optan por emigrar en busca de una vida mejor.

Este es el caso del protagonista de la película que os quiero recomendar. Se trata de la última creación de los directores Oliver Nakache y Eric Toledano: “Samba”.  Samba es un joven senegalés que vive clandestinamente en Francia desde hace 10 años buscando una vida mejor. 
La película comienza con un espectacular plano secuencia que te engancha desde el primer momento. Magistralmente nos  va llevando desde el lujo y la opulencia del comedor de un glamuroso hotel hasta las entrañas de la cocina donde los que trabajan son inmigrantes, la mayoría “ilegales”. 

Romanticismo y pinceladas de humor suavizan el dramático tema de fondo de la inmigración ilegal y la xenofobia.
Es una película que no hay que perderse. 

Como tampoco debéis perderos este delicioso mousse. Un auténtico placer saborear desde la primera hasta la última cucharada.

Como siempre os dejo  vídeo al final de la entrada. Requiere su tiempo preparar este mousse, pero merece la pena el resultado.